Marzo es el Mes de Concientización sobre la Esclerosis Múltiple.
Victoria Reese tenía 25 años cuando comenzó a sentir adormecimiento y hormigueo en las piernas. Inmediatamente supo que algo estaba mal. Después de una serie de síntomas preocupantes, finalmente le diagnosticaron esclerosis múltiple. Desafortunadamente, como mujer afroamericana, experimentó demoras y prejuicios en su diagnóstico debido a conceptos erróneos sobre quién puede contraer la enfermedad.
La esclerosis múltiple es una enfermedad autoinmune que afecta el sistema nervioso central y puede ser debilitante si no se trata adecuadamente. A pesar de que las investigaciones sugieren que las mujeres blancas tienen un mayor riesgo de desarrollar esclerosis múltiple, cada vez más se descubre que mujeres afroamericanas también la padecen.
Para un diagnóstico y tratamiento oportunos, es fundamental que las personas busquen una atención médica adecuada y se conviertan en sus propios defensores de la salud. Además, es importante que la comunidad médica reconozca que la esclerosis múltiple puede afectar a cualquier persona, independientemente de su raza.
Es fundamental cambiar la narrativa en torno a la esclerosis múltiple y las personas de color, para garantizar que todos tengan acceso a un diagnóstico y tratamiento adecuados.